Sobre la cruz de la que colgaba el maestro se leía un mensaje que decía: Jesús Nazareno Rey de lo Judíos. Para el texto se utilizaron las lenguas del momento: latín, griego, y hebreo. La lengua latina se mantuvo sobre las otras lenguas, y la tradición nos enseñó que sobre la cruz decía INRI, sigla formada por las iniciales de cada palabra de la inscripción: Iesus Nazarenus Rex Iudaerum.
En un tono de burla Pilato mandó a publicar el nombre de un rey: Jesús, pero lo que para él era burla, hoy sabemos que representa una verdad profunda del evangelio. El mensaje de Jesús decía: el reino de los cielos se ha acercado; el mensaje de la cruz anunciaba su nombre: Jesús.
Un reino lleva la marca de su rey. El nombre de rey definía una línea de mando, de gobierno, mostraba la razón de ser del reino, y el reino de Dios no era una excepción. El nombre Jesús indica la misión del reino de Dios, la salvación.
El evangelista Lucas cita las palabras del maestro: Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido. El reino de la salvación hacía su entrada en medio de un mundo de pecado y de muerte. Estar dentro del reino de Dios es disfrutar de una salvación que brinda paz, amor, esperanza.
Creer que Jesús es Dios va más allá de anunciar una verdad doctrinal, debe convertirse en una realidad viva en nuestra vida. La salvación no es solo una hermosa verdad, es una realidad que transforma el corazón de quien cree en el rey.
En la inscripción de la cruz una verdad se anunciaba: existe un reino cuyo rey se llama Jesús y en donde la salvación es una realidad práctica en la vida de sus ciudadanos.
El nombre Jesús significa salvador. Su nombre reúne todo lo que él es, y todo lo que es su reino. La inscripción en la cruz condensa un resumen doloroso por su contexto, pero esperanzador para el pecador por su mensaje: El rey salvador está aquí.
¿Eres salvo? ¿Cuál es la inscripción que de Jesús hay en tu corazón? ¿Le reconoces como tu único y suficiente salvador? ¿Haces parte del reino de Dios? Te invitamos a conocer el nombre de rey, a disfrutar su significado, y a vivir una vida de salvación en el reino de Dios.
Imagen de: Pablo Fernández. Tomada de: https://www.flickr.com/
John Anzola
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