9/5/11

La belleza de una llena luna blanca, se aprecia mucho mejor en una noche absolutamente oscura. La oscuridad de la noche, el cielo negro, y el silencio pareciera ser que se unen al unísono para que la gloria de la belleza caiga únicamente sobre ella, la luna. Pareciera que todo en la naturaleza se uniera en un sonido armónico para que la intervención fuerte y absoluta de la luna se haga sentir en las infinitas líneas del cielo. 


Ella siempre está ahí, blanca, llena, radiante, luminosa, pero es el cielo oscuro el que permite que su luz llene la tierra. Si colocáramos la misma luna en un cielo gris, su brillo no sería el mismo, si colocáramos la misma luna en un día soleado seguramente su brillo no se podría apreciar. Es el marco oscuro del cielo quien nos permite apreciar la hermosura de una blanca luna llena. 

Cuando hablamos de temas como el amor de Dios y el evangelio es necesario colocarlos en el lugar justo, para apreciar su belleza, su grandeza; para apreciar, en últimas, la grandeza de Dios. Es necesario recrear el telón absolutamente oscuro en fondo, para que el mensaje de Dios brille en la oscuridad de nuestra vida. 

La palabra evangelio significa buenas noticias, y para que una noticia sea buena en sí misma, debe entenderse en la situación exacta en la que produce. 

La noticia en la se anunciaba que los Aliados estaban avanzado contra Alemania y estaban cerca de los campos de concentración Nazi no tenía el mismo efecto en las familias que estaban cómodas en sus casa que para los ciudadanos polacos que habían sobrevivido a las cámaras de gas. La alegría, al revivir la misma noticia nunca es igual. 

La noticia de la operación Jaque, en Colombia, en la que liberaron a 15 secuestrados generó un júbilo nacional que duró mucho tiempo. Fue calificada como una operación perfecta, no se disparó una sola arma, y fueron rescatados de las cadenas del secuestro 15 personas. La alegría que vivimos los que no teníamos familiares allí, no es en nada comparable con la alegría que debieron sentir los familiares de estas 15 personas. Para ellos en realidad fue una Buena Noticia, una noticia que cambió sus vidas, una noticia que trajo esperanza, que trajo paz, que permitió terminar con la zozobra del qué estará pasando, del estarán vivos aún. 

Al ser el evangelio una Buena Noticia es necesario recrear la situación en la que se dio para entender que es el evangelio, y porque es una Buena Noticia a toda la humanidad. 

Cual si tuviéramos que retratar un cuadro en donde aparase una luna llena sobre un oscuro cielo, permítame describir, sin ser amarillista ni sensacionalista, estos dos elementos que conforman la imagen. 

El oscuro cielo, la oscuridad de nuestra vida. Podríamos describir de muchas maneras nuestra situación ante Dios, nuestro estado ante Dios, podríamos hablar de los peores pecados cometidos en la tierra, podríamos hablar de la maldad que nos rodea, de los peores crímenes, del hambre, de la pobreza, de la violencia, pero para algunos esta descripción podría ser lejana. Hablemos de algo cercano. 

Lucas, un médico que dedico parte de su vida a investigar la historia ciertísima, describe cómo esa Buena Noticia llegó a la tierra, pero también describe a quiénes les llegó, y creo que es muy buen ejemplo que nos sirve para describir el marco oscuro, esta oscura realidad en la que llegó la Buena Notica. 

Unos pastores. Gente del común. ¿Por qué no fueron los ángeles a los sabios, y anunciaron a ellos la Buena Noticia? ¿No había en todo Israel mejores personas que los pastores para que recibieran esta notica? 

Los pastores eran personas ignoradas. Aunque los hebreos eran pueblos ganaderos, los que ejercían esta labor eran personas alejadas de la sociedad. Vivían en todo momento solos, cuidando sus animales. Para ser pastor no era necesario estudiar, ni prepararse, era una profesión que se heredaba de generación en generación. Por estar con animales su olor no era el mejor. Por estar tanto tiempo lejos de casa no eran extrañados por nadie. Pero sí, a ellos les llegó primero la notica que a los que estaban en los palacios reales. 

Si tuviéramos que asignarle un color a la soledad, a la ignorancia, al olvido, a la lejanía, le asignaríamos el negro, la oscuridad del corazón. El caso de los pastores es una buena descripción de este contexto oscuro del que estamos hablando. 

Pero nada es comparable a la oscuridad que todos los seres humanos compartimos, en la que todos estamos, en la que todos vivimos, la oscuridad de la muerte, muerte no física, sino espiritual como consecuencia del pecado. 

No hay un marco más oscuro, más denso, más escalofriante que el corazón del ser humano. 

Fuimos creado por Dios, él nos hizo, fuimos hechos en sus mismas manos, vivimos por su aliento de vida en nosotros, pero nos descarriamos, nos descarriamos como ovejas que no tiene pastor, rodamos como una pelota por una pendiente, rodamos sin dirección, y cada en cada giro que dábamos nos alejábamos más de nuestro creador. 

Pablo describe al ser humano como un destituido de la gloria de Dios, lejos de la gloria de Dios, fuimos privados de Dios, fuimos separados, arrancados de los pies de Dios. Por estos días el alcalde de Bogotá fue destituido de su cargo, lo separaron de su cargo, y no fue por su buen comportamiento. Esa es nuestra situación ante Dios. Todos somos pecadores. 

No hay nada más oscuro que el pecado. El pecado trae como consecuencia la muerte. La maldad, la violencia, el hambre, la pobreza, la guerra el homicidio, el asesinato, la mentira, la hipocresía, el adulterio, solo son consecuencia del pecado. SI hoy tuviéramos que pintar nuestra vida de algún color seguramente escogeríamos el negro. No porque solo hiciéramos cosas malas, sino porque es nuestra condición. Somos pecadores. 

La luz, la claridad el esplendor. En ese marco que hemos descrito es donde aparece la luz, y ella brilla con mucha más intensidad cuando somos conciéncienles de nuestra condición. 

La Buena Noticia es buena en la medida en que entendamos que nuestra situación ante Dios no es buena, que es mala. La luz del evangelio brillará con mayor intensidad cuando la coloquemos en la oscuridad de nuestra vida. 

En la oscuridad de la noche, cuando la soledad se hace más fuerte, lo ángeles de cielo anunciaron el evangelio a los pastores: Ha nacido hoy un salvador, que es Cristo el señor. 

La Biblia resume el evangelio de la siguiente manera: La Buena Noticia que hoy anunciamos es esta: Dios se ha manifestado en carne, habitó entre nosotros y vimos su gloria lleno de gracia y verdad, que Cristo murió en la cruz del calvario por nuestros pecados, y que resucitó para darnos salvación. En eso creemos. 

Esa es la luz del evangelio que alumbra por completo la oscuridad de las noches de nuestra alma, al punto que nuestra vida no será semejante a una fría noche, sino a un radiante día, aun día soleado donde la luz del sol no solo brilla en nosotros sino brilla para otros. 

Seguramente nuestra vida es semejante a una fría noche, más oscura de lo normal, el pecado ha hecho de nosotros un fraude, y sentimos que efectivamente estamos separados de Dios, destituidos, lejos de Dios. Hoy hay oportunidad. Hoy hay una Buena Notica que esen verdad Buena si haz comprendido nuestra mala condición. 

Esta es una oportunidad para que la luz del evangelio brille en tu vida. El resultado, salvación, vida eterna. Cree hoy en este mensaje, recíbelo y tu vida cambiará, brillarás como un día de verano. 

Mayo 2011
John Anzola




0 comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu comentario. No olvides dejar tu correo electrónico.